sábado, 26 de septiembre de 2009

The Go! Team: "delirium indie" (BAM '09)

Combinar lo mejor del sonido independiente de corte británico, con eléctricas dosis del funk más setentero, con el rap más ochentero y alguna que otra cucharada de folk parece una locura. Si un grupo practicara dicha fusión haría volver loco a cualquiera de esos críticos elitistas que tanto empeño ponen en buscar etiquetas de lo más pintorescas y rebuscadas. Pues existe una formación que consigue mezclar y actualizar los sonidos más genuinamente underground con una maestría que solo en concierto brilla con todo su esplendor. Los ingleses The Go! Team consiguen hacer bailar incluso al público más frío y aburrido y ayer en Barcelona ofrecieron un concierto delirante y dinámico que trasladó al público reunido en la céntrica Plaça Reial a una dimensión tan desconocida como fascinante y llena de energía positiva.

El festival BAM (Barcelona Acció Musical) del presente año se presentaba con algunas dudas sobre la calidad de su cartel. Quizás porque en la ciudad condal estamos ya muy acostumbrando a un cierto nivel en lo que respecta a los festivales y conciertos que se viene llevando a cabo en los últimos tiempos. Aunque para todo aquel que se precie de ser un amante de la música debería ser una obligación el saber buscar y descubrir nuevos grupos acudiendo a conciertos de todo tipo. Un servidor así se considera y aunque los grupos que actuaron en el concierto que ayer tuve el placer de disfrutar no son ni mucho menos unos desconocidos del panorama indie, quizás no entraban en mi biblioteca mental de formaciones a tener en cuenta.

El indomable Patrick Wolf sorprendió por su estética y puesta en escena, al mismo tiempo que gustó por un peculiar estilo que bebe de la electrónica más salvaje y caótica, el dulce y pegadizo ritmo de los violines folclóricos irlandeses, una voz grave pero a la vez flexible y una guitarra al estilo Kiss que proyecta sonidos atípicos e inverosímiles. Un músico que demuestra en el escenario su espectacular dominio de instrumentos de toda clase. El arpa, el clarinete, el piano, el órgano, la armónica, la guitarra y por supuesto, el violín dan mucha profundidad a las canciones del británico. A modo de icono gay, Patrick paseó por el escenario como una verdadera divinidad del pop contemporáneo, dando muestras de ser un soberbio músico, a la vez que un gran intérprete de gesto. Mención debo hacer también para la banda que lo acompañó, con una violinista que en todo momento acompañó la locura del cantante con unas impresionantes interpretaciones.




The Go! Team me sedujeron de principio a fin. La versatilidad estílistica de la banda de Brighton, con la leona e insaciable vocalista Nkechi Ka Egenamba "Ninja" (nacida en Londres aunque de padre nigeriano y madre con raíces egípcias) al frente y el delirio de los seis integrantes que en ningún momento pararon de bailar y moverse de un lado a otro, impactó en una Plaça Reial abarrotada de público de todas las procedencias. Abriéndome paso entre los guiris despistados que deambulaban por una ciudad que les fascina, modernas alocadas con su cartón de sangría en mano, adolescentes en busca de un compañero con quien disfrutar de la noche más allá de la música en vivo, chicos con ganas de bailar, gente que andaba buscando los marcianos después de tomar un exceso de sustancias psicotrópicas y los imprescindibles "paquis", que ofrecían en todo momento latas de cerveza frías a precio razonable, conseguí llegar a segunda fila. Enseguida me llamó la atención la diversidad de los componentes del grupo. Las asiáticas Chi Fukami Taylor (batería) y Kaori Tsuchida (batería, vocalista y teclista) aportan, junto a Ninja, un llamativo toque exótico a la banda. Y esa diversidad se ve reflejada sin duda en su estilo musical, tan anárquico como fascinante.



En algo más de una hora de actuación, The Go! Team hicieron estallar su particular volcán de ritmos con las dos baterías sonando al unísono. Canciones que en ningún momento se centran en la melodía pero que se presentan con tanta intensidad que invaden de alegría incluso al más amargado. En un par de ocasiones la formación se decantó por dar descanso a tanto baile alocado tocando canciones dulces y sencillas, con armónica y banjo incluido. Su versatilidad también se demostró mediante las rotaciones instrumentales, en algunos momentos fue Ninja quien se puso al mando de la batería para que Kaori ejerciera el papel de vocalista. Ian Parton, el fundador de la formación, estuvo un poco más frío que sus compañeros aportando el pequeño toque de seriedad necesario para mantener el equilibrio perfecto.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

Gordos (o lo que se esconde en una barriga)

No hace muchos meses que una compañía irlandesa de vuelos de bajo coste estuvo dando vueltas a la posibilidad de establecer una "tasa para gordos". La idea consistía en aplicar una tarifa especial para aquellas personas con un nivel de masa corporal superior a los cánones que la sociedad establece como validos. La polémica desatada y otras circunstancias que se desconocen hicieron que los responsables de la compañía abandonaran la idea. La obesidad es, probablemente, uno de los mayores problemas de las sociedades occidentales. No solo por los evidentes problemas de salud que alguien con exceso de peso puede padecer, sino también por los estigmas, la discriminación y los traumas que se pueden generar en el individuo con exceso de peso.

El realizador Daniel Sánchez Arevalo, con su película Gordos, nos muestra sin pudor la fragilidad del ser humano, incluyendo todos aquellos mecanismos que cada uno desarrolla con tal de compadecerse a si mismo y justificarse delante del resto. Sin caer en fáciles moralismos ni tópicos absurdos, la película se sirve del problema de la obesidad para introducirse en los miedos, las inseguridades y la retorcida falsedad que siempre queremos aparentar. Desde la sexualidad hasta las relaciones de pareja, pasando por la soledad, la familia, los lazos de conveniencia, los bloqueos o el miedo a ser uno mismo. Cinco historias enlazadas entre ellas por un grupo de terapia. Personajes muy bien trabajados que nos demuestran que incluso aquel individuo que aparenta ser el más cuerdo, puede encontrarse sumergido en su particular fracaso.

A destacar el buen trabajo de Antonio de la Torre, quien tuvo que engordar 33 kilos con tal de meterse en el papel de Enrique, la cara televisiva de una conocida marca de pastillas para adelgazar que en realidad sufre su propia pesadilla. Un hombre que ofrece un falso rostro ante las cámaras de la televenta, puesto que en realidad necesita comer para intentar paliar una ansiedad que le acecha sin cesar. A pesar de que algunas críticos sostienen que Sanchez Arévalo ha intentado comprimir en una sola película demasiadas historias, la realidad es que podemos sacar una intepretación única y elemental: la debilidad, la incertidumbre, la falta de autoestima y el ritmo galopante de una sociedad que cada vez es menos humana, nos conduce irremediablemente a elegir caminos incorrectos, descuidando nuestra salud y olvidando los verdaderos motivos que siempre nos han hecho sentir vivos. Aunque esta sea una lección que no todos los espectadores habrán observado.

lunes, 14 de septiembre de 2009

Terror en Tordesillas. En honor a la virgen?

No es de extrañar que toda aberración se haga en honor a motivos religiosos. Al igual que la inquisición usurpó con crueldad la vida de centenares de hombres y mujeres sin que hubiera justificación alguna, a día de hoy la violencia persiste en la sociedad "civilizada". La vieja y venerada tradición taurina española nos ha iluminado este verano con multitud de festejos crueles e impropios del mundo moderno y tolerante en el que se supone que vivimos. No son episodios aislados ni nuevos pero por algún motivo, desconocido por un servidor, los medios se han hecho eco de todas y cada una de las brutalidades que se cometen contra el astado por todo el territorio español. El caso más reciente el de Tordesillas, municipio cercano a la ciudad de Valladolid. Sin ir más lejos, este pueblo celebra cada segunda semana de septiembre un acto cruel, despiadado, inconcebible y aberrante. Alegando que es "en honor a la virgen de la Peña", un toro es acribillado a lanzazos hasta que muere desangrado. Pero esto no es todo, cuando el animal cae moribundo y sin apenas fuerzas para luchar, los "héroes" del pueblo le cortan los testículos. Lo más espantoso es que después de recabar cierta información acerca de este acto cobarde y repugnante, uno descubre que a la ceremonia se la conoce como "Torneo del Toro de la Vega" y que tal tradición está considerada como una fiesta de interés turístico regional.

Por suerte, en esta ocasión los contrarios a tal práctica han conseguido que su voz de oíga en toda España. Una manifestación encabezada por Jesús Cifuentes, líder del grupo Celtas Cortos, puso en alerta de la celebración de esta cruel práctica. Quizás aún no se consiga, pero antes de poder terminar con la muerte de los toros en los ruedos, es necesario conseguir que no se celebren más asesinatos como el de Tordesillas. El maltrato y la violencia nunca pueden ser motivo de fiesta. La matanza del Toro de la Vega tendrá lugar mañana, día 15 de septiembre y las iniciativas populares para terminar con esta brutal tradición aumentan día tras día. El PACMA (partido antitaurino) ha recogido firmas y ha presionado a las autoridades locales. A través de Facebook también ha surgido una plataforma en contra del cruel asesinato del toro y si con todo esto no basta, siempre se puede mandar un correo electronico (ayto.tordesillas@dip-valladolid.es) al ayuntamiento de Tordesillas opinando acerca de su "historia" fiesta.

Algunos defienden que se siga procediendo a tal ejecución pública del animal, alegando que se trata de una de las fiestas taurinas más antiguas de España, puesto que viene celebrandose desde hace siglos. Quizás estos defensores de lo injustificable no razonan muy bien. Ofrecer el sacrificio de chicas vírgenes a los dioses, matar a la familia de aquel quien hubiera cometido un crimen, la violencia contra las mujeres o la ablación del clítoris femenino son también tradiciones que se llevaron a cabo a lo largo de siglos en nuestro planeta. No en base a su antigüedad vamos a decir que se deberían seguir practicando . Es verdad que la cultura taurina es un tesoro de incalculable valor en España, es concebible que se sigan practicando ciertos festejos como son la entrada de toros y caballos que se celebra en la localidad de Segorbe (Castellón). Se trata de una muestra de habilidad por parte de los jinetes que conducen a los astados por las calles del pueblo. No hay sangre, no hay violencia. Es un espectáculo dónde la elegancia de los caballos se mezcla con total naturaleza con la bella cursa de los toros. Lamentablemente, el caso de Segorbe es una excepción. Cada verano asistimos a un exagerado número de festejos dónde la diversión se concentra el maltrato al animal. Cobardes mozos se dedican a golpear hasta la muerte a los toros en muchos pueblos de toda España. En la mayoría de poblaciones de la Comunidad Valenciana cada verano se organizan encierros por el pueblo enciendo con fuego las astas del toro y produciendo graves trastornos en el animal, al someterle noche tras noche a las mismas barbaridades. Muchas vaquillas son objeto de maltratos y mueren agotadas después de haber recibido centenares de golpes y en muchos casos fallecen asfixiadas por las altas temperaturas a las que son sometidas dentro de estos remolques de metal.

En Coria, una localidad de la provincia de Cáceres se celebra cada mes de junio otro acto de barbarie y crueldad. El toro es acribillado con soplillos con alfileres y obligado a correr por todo el pueblo hasta que muere por agotamiento. No se puede considerar aún una victoria, pero por lo menos este año se consiguió que el lanzamiento de dardos se prohibiera.

Las autoridades deben tomar medidas inmediatamente dejando de lado la historia de tales tradiciones, puesto que la realidad es más que visible. Torturas innecesarias y maltratos inconcebibles para una sociedad que alardea de ser moderna y avanzada. Si se desea hacer ofrendas a una virgen basta con unas flores rojas y frescas. Seguro que ella nunca querría que se derramara ni una gota de sangre en su nombre.



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sábado, 5 de septiembre de 2009

Más allá de lo que (no) vemos

Muchas veces, los seres humanos tendimos a ver las cosas focalizando solo el punto que más nos atrae. Nos empeñamos en pensar que a través de una lupa, los objetos o realidades que queremos observar se verán mejor, nos esforzamos en creer que fijándonos en los detalles sabremos más cosas acerca de nuestro objeto de estudio.

Erramos en el método, pues no hay mejor forma de entender el mundo que a través de una visión global y objetiva. Cerrar los puntos de mira, es ser conformista, por mucho que nos acerquemos, nunca podremos saborear toda la belleza y magnitud de cada una de las realidades que nos rodean.

"Mientras que para la sociedad no existe mayor pecado que la vida contemplativa, los más cultos opinan que la contemplación es la ocupación natural del hombre"

(Oscar Wilde)